Helou viajeros! En este post os cuento qué ver en Budapest . Nosotros estuvimos 4 días y, para que sea más ameno, fácil y ordenado, os lo voy a contar por días.
En este post podréis encontrar el planning que seguimos el primer día que llegamos a la ciudad.
Aquí encontrarás:
Llegada a la ciudad y al hotel
Nuestro vuelo salía a las 09:35 del aeropuerto del Prat, en Barcelona. Eran las 12:15 cuándo llegábamos a Budapest.
Con las nuevas políticas de las compañías low cost, es frecuente tener que esperar en el aeropuerto al equipaje. Así que entre unas cosas y otras eran cerca de la una del mediodía cuando compramos los billetes para ir a la ciudad.
En este post os cuento los datos prácticos de como llegar a la ciudad desde el aeropuerto.
El autobus 100E, que fue la opción que elegimos nosotros, nos dejó en la parada Astoria. Centro neurálgico de comunicaciones donde también se pueden coger varias líneas de tranvía, autobús y metro.
Si llegáis, como nosotros, a la hora de comer, en Astoria hay muchas opciones. Sobre todo de comida rápida, para no perder ni un solo minuto de visita en la ciudad!
En este caso, y para no perder la costumbre, decidimos comer algo rápido en el McDonalds que hay justo al bajar del autobús.
Al ser una zona donde hay mucho transporte público, será muy fácil encontrar una máquina para poder sacar un billete.
En nuestro caso, elegimos el de 72 horas (aquí os cuento más sobre el transporte en Budapest).
Desde Astoria, cogimos otro bus para llegar a nuestro hotel, el Gold Hotel Budapest, en la parte de Buda.
Con las maletas en la habitación, y bien abrigados, salimos para empezar a descubrir zonas de Budapest.
Ciudadela de Budapest
La ciudadela de Budapest o Citadella, es el punto más alto de la ciudad.Se encuentra en la cima del Monte Géllert. Podéis imaginar las vistazas que hay desde aquí.
En esta zona de la ciudad, se constuyó una fortaleza en 1854 a modo de edificio de vigilancia. A lo largo de los años este edificio ha pasado por muchos usos e incluso hay un búnker en su interior construido como protección durante la Segunda Guerra Mundial
Cómo llegar a la Ciudadela: el bus que para por allí es el número 27. Aún así, desde la parada hasta la fortaleza, hay que andar un poquito.
ACTUALMENTE NO SE PUEDE ACCEDER AL INTERIOR DE LA FORTALEZA POR OBRAS.
Precio entrada (si algún día reabren): 1.200 florines por persona (3,80€ más o menos).
Aunque no se pueda entrar en la fortaleza, es muy agradable pasear por la zona. Encontraréis algunos puestecitos con artesanía y souvenirs. Y por supuesto, si vais en otoño o invierno, encontraréis puestos de vino caliente.
Estatua de la Libertad ( Szabadság szobor)
Como en Nueva York, en Budapest también tienen una estatua de la libertad, que en húngaro se traduce como Szabadság Szobor.
Esta estatua se construyó en 1947 para conmemorar la liberación de Hungría de la Segunda Guerra Mundial »gracias» a los soviéticos.
Esta estatua no está exenta de política ya que fue construida por los mismos soviéticos y en su inscripción se podía leer: A la memoria de los héroes soviéticos liberadores erigida por el agradecido pueblo húngaro en 1945.
Los héroes liberadores fueron los mismos que los sometieron posteriormente al comunismo. Por ello la estatua se intentó destrozar varias veces por el pueblo hasta que finalmente cambiaron la inscripción a: A la memoria de todos aquellos que sacrificaron sus vidas por la independencia, la libertad y la prosperidad de Hungría.
Monte Gellért
Después de estar un rato por la Ciudadela, bajamos por los caminos que hay por el Monte Gellért.
La verdad es que es un paseo muy bonito y ameno. Si tenéis la suerte de ir en otoño, veréis los caminos cubiertos de hojas secas. Una estampa preciosa!
Este monte recibe el nombre por San Gerardo. Cuentan que San Gerardo fue invitado por el rey de Hungría para evangelizar a las tribus nativas que habían en la ciudad.
Los nativos no se lo tomaron muy bien y, según la leyenda, metieron a San Gerardo en un barril de cerveza y lo tiraron monte abajo.
Por ello, decidieron ponerle su nombre a la montaña.
Con tremenda historia, ponerle el nombre de San Gerardo a la montaña no era suficiente. Al bajar, nos encontramos con la estatua conmemorativa al santo. Una pedazo de estatua que tiene unas vistas increíbles del Puente de Isabel (Erzsebet híd).
Puente de Isabel (Erzsebet híd)
El puente original fue construido en 1903 en honor a la conocidísima Sissi, una reina muy querida por los húngaros.
Lamentablemente, durante la segunda guerra mundial fue bombardeado. Fue el único puente que no pudo reconstruirse, así que, tuvieron que rehacerlo en el año 1960.
Aunque haya cambiado su aspecto y sea un puente completamente nuevo, sigue manteniendo el nombre en honor a Isabel.
Váci utca
Al bajar del Monte Gellért, cruzamos el puente de Isabel para ir a pasear a la calle Váci Utca.
Esta calle es una de las más importantes y en ella podréis encontrar un montón de tiendas. Desde las más conocidas como Zara, hasta las típicas de souvenirs pasando por alguna peculiar donde solo se venden artículos de navidad.
Es una calle ideal para pasear. Nosotros llegamos hasta la plaza Vörösmarty que empezaba a llenarse de ambiente de viernes noche.
Kürtőskalács para merendar
Después de tanto paseo, ya teníamos algo de hambre para merendar. Así que buscamos cuál era el mejor Kürtőskalács de Budapest.
Uno de los mejor valorados era Molnár’s kürtőskalács, que justo está en la calle Váci Utca.
Aquí, podréis ver como se hacen los famosos Kürtőskalács, ya que tienen la zona cara al público. Este dulce es típico de países del este como Hungría o Praga.
Es una masa dulce que ponen en un cilindro para darle forma y se cuece en hornos de leña. Una vez hecha, se puede cubrir con azúcar o chocolate y se puede rellenar.
En este lugar, lo típico es rellenar los Kürtőskalács de helado. Y todo junto está buenísimo!
Crucero por el Danubio
Al anochecer, hicimos un crucero por el Danubio. Una experiencia que para mí se ha vuelto imprescindible.
Lo hicimos con la empresa Legenda, pero hay un montón que ofrecen este servicio.
Estos barcos se cogen en el embarcadero que hay justo enfrente del Hotel Marriot. Si ponéis Legenda Cruises en Google maps os lleva sin problema!
Los de Legenda tienen audio guía en varios idiomas (español incluido) y en el precio entra una consumición.
La audio guía es muy entretenida, ya que narra la historia de Budapest desde el punto de vista del Danubio. Como si fuera el propio río el que estuveira hablando mientras lo vas recorriendo.
El precio es de 5 900 HUF por persona, unos 18€-19€
Cena en Frici Papa
Después del crucero por el Danubio, fuimos en busca de un sitio para cenar.
Uno de los restaurantes que más se recomiendan en blogs es el de Frici Papa. Así que fuimos para allí buscando comida húngara económica.
Para llegar, como teníamos el bono ilimitado de viajes durante 72 horas, cogimos el tranvía número 2 hasta el Parlamento y allí cogimos el bus nº 70 (también sirve el 78).
Cenamos bastante bien y todo nos costó 3.475 HUF (unos 10,70€ al cambio).
Lo mejor del restaurante es que tienen la carta traducida al español, así que será mucho más fácil entender que es lo que llevan los platos.
Eso sí, debéis tener en cuenta que en Budapest se cena bastante pronto. Si vais alrededor de las 22:00 de la noche posiblemente os digan que la cocina ya está cerrada.
Vuelta al hotel
Después de cenar, volvimos a coger el tranvía un par de paradas para coger el bus y llegar al hotel.
Aunque suene a mucho lío, en menos de 20 minutos estábamos de vuelta al hotel en la zona de Buda.
Llegaba a su fin el primer día de nuestra escapada a Budapest y ya estábamos encantados con la ciudad!
